La piedra que desecharon los constructores es ahora la piedra angular...
La Palabra del Señor lejos de quedarse en el pasado se amolda a nuestro día a día... Esa Piedra de la que nos habla el Evangelio en este pasaje, no es más que Cristo, quién para algunos es centro y norte de sus vidas, para otros, una piedra en el zapato.
Cuántas veces desechamos a Aquel que debe ser el fundamento de nuestras vidas...??? Si tan sólo meditáramos por un momento e imagináramos nuestra vida cimentada sobre bases frágiles, sin sentido y sin valores, (moda, tecnología, dinero, estatus social,cultura) es decir, todo aquello que me ofrece un mundo frío y sin Dios. En algún momento puede desvanecer, porque si se quiere son cosas efímeras.
Cristo, como Piedra Angular, no permitiría que nuestra vida (hogar, familia, estudios, trabajo) se viniera abajo cuando hemos puesto nuestra confianza en Él. Su Santidad, el Papa Francisco, en su Homilía, a propósito de la Solemnidad del Corpus Christi, nos recuerda que la Iglesia no es una organización cultura, sino, la familia de Jesús; y lastimosamente, lo desechamos como Jefe y Piedra Angular de esta hermosa familia que Él mismo fundó. El Santo Padre nos exhorta a no quedarnos atrapados por el espíritu del mundo, no viviendo de acuerdo a lo que éste nos dicte, mas bien, vivir coherentemente a la FE en un Cristo vivo.
Señor Jesús, fundamento de mi vida, enséñame a caminar de tu mano y reconocerte como mi Dios y mi todo... Amén...!!!
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